jueves, 24 de junio de 2010

Mal Hablado, pero...

Ya es la tercera vez que os escribo en un día, todo un récord. Es una característica mía, aunque normalmente son llamadas o mensajes móviles. La pobre Luann es la principal remitente, así que procuraré dejar de molestarla. Sé que estás muy solicitada en estas cosas.
Siempre hago estos "abusos" de vocablos cuando estoy en fase histérica, como en la convivencia o en los ensayos del Flash Mob.
Ya he acabado de vigilar a mi hermano y su pandilla en la jodida piscina, y gracias a Dios que en mi casa estoy solo, bueno, a excepción de mis abuelos.
Qué mal me conoce mi madre. Una muestra de ello es la pregunta que me ha hecho, "¿Por qué no te gusta la piscina?". Qué lástima, no tiene ni idea. Viéndolo de otra forma, puedo decir que es algo enteramente mío.
Otra pregunta ha sido: "¿Qué es lo que pretendes hacer aparte de quedar con tus amigos?". ¡Joder! Yo, por pretender, tocar el Sol. Obviamente, si estás en medio es un poco difícil.
Además, yo lo único que quiero es pasármelo pipa (deberías decirlo tú, Sammy). ¿Qué hay de malo en eso? Lo que no voy a consentir es que tenga que renunciar a eso por gilipolleces que se podrían llevar adelante sin tener que pringar yo.
No es nada agradable estar en medio del Pasillo Verde, hogar de skaters y de pre-guays, con la única compañía de adultos y enanos.

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