viernes, 23 de julio de 2010

Entre plásticos y lentejuelas.

Bueno, ayer salí. Quedamos en casa de Proteínas, donde nos estuvo enseñando un juego de PC extremadamente parecido al "Hotel Dusk", llamado "Black Mirror II". A mí el juego me dejó muy enganchado, y me lo descargaría de no ser porque apenas uso el ordenador una hora. No me merece la pena.
Ya a las ocho, salimos hacia Sol. La tarde no prometía mucho, quedamos Ciru, Prote, y dos chavalas más. Era el único tío, y os podéis hacer una idea de la situación. Yo estaba con una oreja en la "conversación", y la otra en un casco de mp3 blanco, adquirido en un chino.
En Callao, Proteínas se quería comprar unos pantalones baratitos. Nos metimos en dos tiendas muy especiales. La parte delantera era normal, pero el fondo, la gran mayoría de la tienda, estaba llena de pelucas, gafas de plástico, y disfraces propios de peli porno. Es decir, las típicas vestimentas de la doncella, la enfermera, la gatita, la bailarina de Oriente Medio, etc.
En la segunda, del mismo corte que la primera, incluso más, Ciruela decidió que se iba a probar corsés y demás. Obviamente, hizo detalladas alusiones a lo bien que se lo pasó otra tarde en el mismo sitio con un mini grupo extraído a partir de nuestro grupo (¿?).
Me hace rabiar el que me digan lo bien que se lo pasaron otros días, en los que no estaba yo presente. También me fastidió el que la gente disfrutase allí, y yo (cómo no) fuese a contracorriente.
Volvamos a la narración, yo me quedé solo en la tienda meintras las chicas se metían en un probador de mala muerte. Yo no sabía qué hacer, estaba rodeado de plásticos y lentejuelas. Seguí con mi compañero de fatigas, el iPod, y tocó el turno de "The Visitors", el disco deprimente de ABBA.
Ya salieron, y nos fuimos. Por suerte, cogimos el Metro, y yo me bajé en Embajadores, la segunda parada. Había sido una mierda de tarde, y quería volver a mi casa para poder empezar a leer "Middlesex".
Llevo cosa de un año intentando coger el libro en la biblioteca, pero siempre que iba, estaba prestado. Ayer no fue así, y casi me empiezo a reír en la silenciosa sala cuando veo "Disponible" al lado de "Middlesex, Jeffrey Eugenides".

Releyendo esto, me doy cuenta de que no estoy siendo completamente sincero con vosotros. Los hechos son verídicos y son así, pero ya lo que yo pienso no, me guardo cosas. Pero bueno, simplemente lo hago por vergüenza. Espero que me lo sepáis perdonar. Tampoco creo que sea algo súper emocionante para vostros.

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