martes, 28 de diciembre de 2010

El Hogar II.

1ª Parte en El Hogar I.

Al dejar a Ciruela y Proteínas, salí corriendo en dirección al hogar. Últimamente estoy desvariando mas que de costumbre: me siento culpable al salir por no pasar mas tiempo con mi familia, tengo miedo de que a alguien de mi casa le pasa algo malo, de que muera algún miembro, yo, el que hay después, el ver pasar el tiempo irremediablemente... Por todo, corría como loco en dirección a mi casa. Como los 5 días anteriores, reventé y estuve llorando. La situación se me quedaba grande, y me acabaría aplastando. Al fin y al cabo, de pequeñín no aprendes a ser mayor, a oír hablar de operaciones, funerales, tantos putos "papeles importantes", protocolos jurídicos; aparte de lo que llevo arrastrando.
Al rato, oigo alguien vomitando, exactamente mi abuelo. Le pusimos el tensiometro, y la tenía un "poco disparadilla". Empece a hiperventilar. Íbamos a urgencias. Cogimos in taxi, y mientras tanto, yo rezando como un condenado. Prometí que si no ea nada malo llevaría flores a Jesus El Pobre (aquí se puede ver mi educación católica).
Tras mucho rato esperando en la sala que ya me es prácticamente familiar, salieron mi abuelo y mi madre. Por suerte, solo era una astenia ligera, esto es (yo no lo sabia hasta que recurrí a la Enciclopedia Durvan) un bajón de fuerzas.
Como comentario adicional, estuve todo el rato con la cazadora negra y la capucha echada. Si hubiera llevado mis zapas espaciales, iría tal y como fui el día en que me patee tres hospitales en tres horas.

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