Cuando se me va la mente y me quedo mirando vagamente la pared, suelo pensar en mi grupo.
A pesar de ser pocos, cumplimos todos los tópicos de los adolescentes, Así, encontramos las parejas estables, los guarretes, quienes no distiguen entre amor y amistad (y experimentan), los que se enamoran de alguien no correspondido, de alguien mucho mayor...
¿Yo? No encajo en ninguno de estas "clasificaciones". Es algo frío, pero nunca me he enamorado de nadie. En todo caso, he tenido encaprichamientos pasajeros (curiosamente, mayormente con mujeres), pero nada importante.
A veces me preocupa ésto, el que sea tan frío, pero también es cierto que este año me he vuelto más despegado a cualquier tipo de relación. ¿Desengaño?
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